domingo, 21 de febrero de 2010

IN/IM




ANTALGIN

Yo sé que el Antalgin es un antiINflamatorio. Me lo ha dicho mi madre. Es una medicina muy fuerte que te cura muy rápido. Yo ya casi sé lo mismo del Antalgin que los médicos. Mi madre dice que las medicinas no son para los niños, pero menos mal que yo no le he hecho caso. Porque si no fuera por mí, ya no tendríamos casa. Aquel día en que ella se dejó la sarten en el fuego, si no fuera por lo que yo sé, se hubiera quemado todo. Mi padre me explicó, que las cosas que se queman son inflamables; por eso, cuando vi que la cocina ardía, le eché un Antalgin.


Hiperbreves S.A. (Sólo 175 microrrelatos). Raúl Sánchez Quiles. Baile del Sol. 2010


Se me ocurrió el otro día en mitad de una reunión, la cantidad de palabras que podemos encontrar con el IN/IM referentes a las cosas cotidianas que nos ocurren... In-congruencia, In-coherencia, In-dignación, In-formalidad, In-credulidad, Im-paciencia, Im-presentable... no me canso: In-finitas. Pero hoy, voy a comenzar esta serie de IN/IM, con "IM-posible dejarlo pasar y estarme calladita".

Esta semana, la prensa local no ha tenido el más mínimo desperdicio.

El miércoles se comentaba el presupuesto de este año asignado al organismo autónomo de cultura de nuestra insigne capital de provincia: 3.7 millones de euros. El mismo del año pasado. Y nos hacían un resumen: El teatro Guimerá, el teatro de la ciudad, que el año pasado se cerró por "reformas", este año seguirá cerrado, esta vez por falta de dinero para programación. La programación de actividades se reducirá a cero, por el mismo motivo. La Biblioteca Municipal, que cerró para trasladarse al flamante nuevo museo de la ciudad, el TEA, tampoco obtiene presupuesto. En el supuesto estado de crisis en el que nos dicen que estamos día a día, no debería quizás sorprendernos. Y digo quizás, para no ahondar en el tema que no es el momento.
Lo que nos sorprende, y desde luego nos in-digna, es que la práctica totalidad de esos 3.7 millones previstos, se van a ir en el pago de salarios y gasto corriente. Es decir, según las cuentas que nos hacen, un 96% de prespuesto de cultura... in-creíble.

Puede que alguno lo entienda. Los ciudadanos de esta capital, vamos a estar contribuyendo a pagar los sueldos de quienes no tendrán nada que hacer durante todo el año, pues no queda dinero para hacer nada. Imagino el disgusto, por dios por dios, de la señora mena, concejala de cultura. ¿También ella seguirá cobrando su sueldo? (qué pregunta más absurda)

El mismo periódico, dedicaba sus páginas de cultura a una super-mega entrevista al sr. César Placeres, jefe espiritual del CCPC, una editorial canaria, de la que ya he comentado alguna que otra cosilla. La entrevista la hacía el sr. Pomares, también editor. Tuve la santa paciencia de leerla íntegra, me parecía in-creíble el contenido. El sr. Placeres, haciendo gala de lo que es su tónica habitual de actuación, puso a caer de un burro a todo quisqui, llamando a unos seres inferiores zoquetes absolutos y a otros animal, ser despreciable. En fin. Mi César de siempre.
En un primer momento, llegó a in-dignarme la respuesta que dio... que el Centro "ha vivido siempre de su trabajo y de sus recursos"... que no de las subvenciones, que según comenta, se las han retirado porque desde hace unos años (desde que lo conozco hace diez más o menos) hay una persecución contra el CCPC, y digo en un primer momento, porque la in-dignación dio paso a una espléndida carcajada. No podía esperar nada distinto del Placeres.
Lo que me sigo preguntando es el porqué de esta entrevista a toda página, pues no se aportó nada nuevo, imagino que quien la hizo tendrá sus motivos.

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