miércoles, 24 de agosto de 2011



... "Tal vez sea posible amar a una mujer por un libro, un poema subrayado, una película en blanco y negro, una casa, la mirada de un hombre cuando habla de ella, la forma en que su perro le espera."


Los días que se apretujan, que se agolpan, que se arrubujan. los días que pasan aprisa o deprisa. pasan los días sin dejar huella, sin darme (feliz) cuenta. los días que se empujan y que entonces ya no son días. ya es mes. ya es año. un año.

y yo, que tiro del hilo, de esta madeja desordenada que son los días, que es un día, y con él... que caen seguidos dos o tres.

y ahí se quedan, como se quedaron los deseos, las ideas, los anhelos, los retos, los proyectos, ((los secretos)), las ganas, las tristezas, las ausencias, los cumpleaños, los adniversarios (por dios elvis, un año más sin ti).

y ahí seguimos. al fresco, esta noche en el porche, al acabar el día, descansando de él.

y así seguimos, y descubro, con el pasar de los días, que la vida es la conjugación simple del verbo SEGUIR.


... "Tal vez sea posible amar a un hombre, por un libro, un poema de Stevenson, "my house, they say", los ojos de una mujer cuando habla de él, la forma en la que su perro le espera"...


en cursiva, "si nos encontramos de nuevo", de ana teresa pereira, con traducción de silvia capón. EX-TRAORDINARIO. baile del sol 2011

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cómo necesitamos, en el fondo, que los días se aburrujen... y sin ni siquiera saber qué es.

Un saludo, gata.

(Si me lees dejo que me ronronees... ja, ja (ja, ja... pero necesitado de lectores, y, sobre todo, editores).