miércoles, 24 de agosto de 2011



... "Tal vez sea posible amar a una mujer por un libro, un poema subrayado, una película en blanco y negro, una casa, la mirada de un hombre cuando habla de ella, la forma en que su perro le espera."


Los días que se apretujan, que se agolpan, que se arrubujan. los días que pasan aprisa o deprisa. pasan los días sin dejar huella, sin darme (feliz) cuenta. los días que se empujan y que entonces ya no son días. ya es mes. ya es año. un año.

y yo, que tiro del hilo, de esta madeja desordenada que son los días, que es un día, y con él... que caen seguidos dos o tres.

y ahí se quedan, como se quedaron los deseos, las ideas, los anhelos, los retos, los proyectos, ((los secretos)), las ganas, las tristezas, las ausencias, los cumpleaños, los adniversarios (por dios elvis, un año más sin ti).

y ahí seguimos. al fresco, esta noche en el porche, al acabar el día, descansando de él.

y así seguimos, y descubro, con el pasar de los días, que la vida es la conjugación simple del verbo SEGUIR.


... "Tal vez sea posible amar a un hombre, por un libro, un poema de Stevenson, "my house, they say", los ojos de una mujer cuando habla de él, la forma en la que su perro le espera"...


en cursiva, "si nos encontramos de nuevo", de ana teresa pereira, con traducción de silvia capón. EX-TRAORDINARIO. baile del sol 2011

lunes, 15 de agosto de 2011



..."mi madre, ahora lo sé, soñaba con un hijo mejor que yo. Un niño perfecto, como la hermanita que murió antes de mi nacimiento. Pero yo no estaba en condiciones de luchar con ese ideal. Desde su ventana, ella contemplaba la arena revoloteando, subiendo hacia el cielo y cayendo de nuevo en forma de partículas de polvo. Mi madre deseaba una hija de cabellos negros como el luto y de rasgos suaves como los de un querubín. Tenía otros secretos, otros sueños en los que no contaba conmigo. En sus relatos no hay lugar para mí. Tampoco aparezco en el álbum de fotos de la familia.

Cuando era un bebé y lloraba en sus brazos, siempre se las componía para pasarme a otra persona: una parienta, una vecina o la criada -una muchachita marcada por el hambre, expulsada de su campamento debido a la última sequía-. Aunque yo me esforzara para atraer su atención y obtener una caricia, siempre conseguía esquivarme o empezar el juego del pasa-pasa. Si estábamos solos, mi madre se refugiaba en el sueño o improvisaba una plegaria urgente, la sexta o la séptima que le debía al Supremo y que le ofrecía allí mismo. Yo esperaba como un buen chico a que terminara su largo rezo, recostado al lado de su alfombra, con los ojos fijos en el cuerpo elástico de mi madre que se doblaba, se estiraba y se doblaba de nuevo en cada unidad -cada rakaat- de la oración. buscaba ansiosamente las palabras adecuadas para conseguir que me dirigiera tan sólo la sombra de una mirada o el esbozo de una sonrisa. Ella, lejana, recitaba sus surats y se contentaba con mirarme con los ojos en blanco al final de su plegaria. No tenía gestos ni palabras para mí. A sus ojos, yo sólo era un estorbo, un misterio que caía en lo profundo, siempre en lo más profundo".


"Pasaje de lágrimas", de Abdourahman A. Waberi, con traducción de Rosa Rosa aparece en breve en la colección África de Baile del Sol que lleva de su mano Jorge Portland.

sábado, 13 de agosto de 2011



a veces se me cae el mundo encima

sábado, 6 de agosto de 2011



"Había previsto que sería él quien la consolara a ella, no al revés. Ella dijo:

-Si aún estuviera vivo quizás pudiera explicárnoslo, pero debemos recordarle tal como era con nosotros. Hay tantas cosas que se desconocen de las personas, hasta de las personas que uno quiere: cosas buenas, cosas malas. Hay que aceptarlas todas.

-Esos niños...

Ella dijo colérica:

-Por el amor de Dios, deja de fabricar a la gente a tu imagen. Harry era de verdad. No era solamente tu héroe y mi amante. Era Harry. Se dedicaba al tráfico ilegal. Hacía fechorías. ¿Y qué? Era el hombre que conocimos.

Martins le dijo:

-Déjate de sermones estúpidos. ¿No te das cuenta de que te quiero?

Ella le miró atónita:

-¿Tú?

-Sí, yo. Yo no mato a la gente con medicamentos adulterados. No soy un hipócrita que convence a la gente de que es el más grande. Yo soy un mal escritor que bebe demasiado y se enamora de las chicas...

-Pero si ni siquiera sé de qué color son tus ojos -dijo ella-. Si me hubieras llamado ahora mismo para preguntarme si eras moreno o rubio o tenías bigote, no hubiera podido contestarte.

-¿No puedes olvidarle?

-No"


hay veces en las que nos equivocamos con las primeras impresiones. quizás es que estás donde no te apetece, quizás hace calor y tú lo que quieres es estar en casa. quizás sea que yo simplemente soy un poco rara para eso de las relaciones humanas. para eso de los amigos. el caso es que errar es humano y rectificar de sabios (o algo así). me encontré con alguien especial a la que quiero. me ha parecido espectacular este diálogo de Graham Greene en "El tercer hombre" y me acordé de inmediato de Talía, no es Marlowe pero podría pasar. Así que para ella, que me ha regalado esta gata.

viernes, 5 de agosto de 2011





Radical. hacía tiempo que nadie me llamaba así por decir lo que pienso de nuestras inexistentes políticas culturales. hace mucho pero mucho, que me mantengo alejada de tales historias, ante la más que patente falta de interés de nuestro gobierno en materia editorial tomé la decisión de no seguir gastando mis energías en convencerlos de nada. no les interesa y punto, les interesa más volver a traer a Juanes o a Maná o a cualquiera de ellos, porque ellos son toda la cultura que necesitamos, que necesita el pueblo no? pues eso... ¿que quitaron las ayudas a la coedición de libros y con eso las ayudas a la publicación de autores canarios? pues bueno ¿que desaparece la dirección del libro? pues vale ¿que quitan las ayudas para acudir a las ferias internacionales? pues nos quedamos... ¿que no hay ayudas a la traducción y los editores que trabajamos fuera no tenemos herramientas para la exportación? no nos preocupemos, ya se ocupa septenio de traducir a nuestros ilustres, supongo que con eso basta, ¿que lo único que existe es el vacío, el silencio y la falta de interés? pues es lo que hay, este es el nivel señores, no hay más. si ellos se escudan en que no hay sector, pues tendrán razón, no hay sector, y si no quieren entender que hay empresas editoriales y que eso debería bastarles, pues que no lo entiendan. Se ha convertido todo en algo desolador y cansino... y lo mejor en estos casos, es dejarlos y seguir tu camino. luego, cuando seamos una editorial supermegafamosa, vendrán con el cuento de que somos canarios...



con esto que digo, no creo ser radical para nada. sólo que si me llaman así guardando silencio, quizás estaría bien darles motivos. mientras me lo pienso, un poema de Ivana Bodrozic. raro en mí, me leo el poemario de arriba abajo, me ha encantado.






La habitación 325






Los traductores tienen derecho

a no traducir el término



El mundo sucede alrededor de mí.



Yo vivo en un hotel

y todos los días cuando voy a la escuela

dejo la llave en recepción

en la pequeña casilla 325,

un poco más pequeña que la habitación en la que

vivimos

mi madre, mi hermano y yo,

y el televisor que un día

tal vez nos diga

dónde está mi padre.

Hasta entonces tres de todo:

camas, tazas, cucharas,

el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo,

y como cobardes compramos

tres de todo

como si ya con él

no contáramos.

Y hay un cojín para sentarse

hecho de la piel

de su chaqueta que

mi tía salvó de Vukovar,

es más o menos todo,

a mi madre nadie,

nadie

la salvará,

ella pasará años en el pequeño baño

de la habitación 325

escribiendo cartas a mi padre

que está DESAPARECIDO.



Ése es el término oficial.



"Primer paso a la oscuridad". Baile del Sol, 2011. Ivana Bodrozic