martes, 27 de septiembre de 2011




Las manos de Goytisolo. la imagen que se queda, (que no desaparezca). delicadas, de dedos finos, ganas de cogerlas entre las mias, cálidas.

las manos, la mirada clara y su risa al hablarme de Mao, como mao tse tung, su gato.


"El mundo es la casa de los que no la tienen", Scheherezade está llena de sabiduría. sin demora, comienzo la lectura de las mil y una noches.

sábado, 17 de septiembre de 2011



ni contigo ni sin ti. se acaba el día, sin darme cuenta, y yo desde ayer con el run-run en la cabeza. ni contigo ni sin ti. me tomo el día de descanso. veo películas ñoñas que dan por la tele, me dejo llevar, leo, y releo algunos libros de baile, y disfruto, porque no hay nada mejor que acomodarse en el sillón, y saber que te espera una buena historia, una que te atrape... "¿No tienes frío? No. No mucho. Como meses antes, él fue a buscar la manta y se envolvieron en ella. Había pájaros aquella noche, y olores, y estrellas." Es difícil encontrar esa historia que te lleva, que te impide moverte: anhelas llegar al final y deseas que no acabe nunca. "-Hola loca... Al reconocer su voz, los pequeños hombrecillos que tenemos en medio del pecho para bombear el corazón se desmayaron." qué difícil y qué bueno, encontrar esa historia, que hace que te vayas dando absurdos permisos cuando se hace tarde: un capítulo más, quince minutitos, a las en punto lo dejo. "Esta tarde quise llamarte para decirte que te odiaba, que estoy harto. Eres tan atractiva, tu jodida cara perfecta, tu asquerosa vida perfecta, tan inteligente, tan interesante, tan jodidamente tú." ni contigo ni sin ti. "Le acaricié la mejilla con mi nariz. ¿No me oyes, loco?, ¿no me oyes?, le pregunté en silencio. Soy yo, tu loquita loca, la que te come la boca en cuanto te descuidas, la que te quiere en silencio para no darte guerra. Le besé el hombro desnudo y alargué mi mano hasta tocar sus dedos. Le agarré del meñique y aun siendo el más pequeño me quedaba grande. Cuánto me arrepiento ahora de no haber alcanzado aquel taxi, cuánto me arrepiento de no haber pasado aquella noche contigo, de haberte tenido un ratito como mío, pero no es fácil correr con un solo tacón, ¿sabes?, no es nada fácil. Esbocé una amarga sonrisa que imitó Asun sin saber en qué pensaba. no le conté a nadie lo de tu mensaje, a nadie, ni a Marieta siquiera, lo guardé en nuestro saquito de papel, en ése en el que escondemos nuestros sentimientos y fingimos que nos queremos como se quieren los amigos. A veces lo abro y miro todo lo que hay dentro. Hay abrazos más largos, caricias en el sofá de la tele, hay críticas celosas hacia la pareja del otro, que si ella es una chula y él un imbécil. Hay un primer beso con diecisiete años en las escalereas del Arenal ¿te acuerdas?, era verano, fiestas de Bilbao, ¿te acuerdas? ¿eh?, ¿te acuerdas que cuando se hizo de día encontramos un saquito de papel y lo escondimos allí dentro?, metimos nuestro beso, lo metimos porque nosotros somos amigos." Esta tarde me acompañaron las Noches árticas, de Ana Vidal, Si nos encontramos de nuevo, de Ana Teresa Pereira, y mi Loca Novelife, de Elvira Rebollo. Baile del sol, 2011. ha sido una buena tarde.


Habemus guep! Baile por fin estrenó página esta semana, la misma dirección, pero nuevos colores. ha sido un embarazo largo, de elefante o de ballena, según empezemos a contar. pero ahí está. las gracias al editor jefe, que se ha pegado el curro. ahora podremos dar un poco más la lata, que es lo que nos gusta. si aún no la viste... asomate bailedelsol.org









domingo, 11 de septiembre de 2011



"El amor, me dijiste mientras ponías el intermitente de la derecha. Hay que poner gasolina a este trasto, continuaste. Pensé que cambiarías de tema, pero no. ¿Sabes?, dijiste, cada vez estoy más convencido de que eso del amor es una tontería. No me quedó más remedio que intentar una frase boba. Creo que dije algo sobre el verdadero motor del mundo, y que bajé del todo la ventanilla del coche y que el sol estaba muy alto y que empezaba a agobiarme tanto calor. Tú seguías. Nos mueven un montón de cosas, pero te aseguro que ninguna de ellas es el amor. No es el amor. Permaneciste en silencio unos segundos, como si no hubieras terminado la frase, pero pusiste el intermitente para girar hacia la gasolinera. Recuerdo que agradecí que aparcaras a la sombra, al lado de un surtidor de gasolina sin plomo. No se veía un alma. La cinta que te había grabado se había puesto nuevamente en marcha, pero apagué el radiocasete. Recuerdo que justo en ese momento, pasaron los dos trailers llenos de coches a los que acababas de adelantar y que los miré pasar, sin bajar del coche."


***


"Limpiar los cristales. Cambiar las sábanas de mi cama. Pasar el aspirador. Poner tres veces la lavadora. Hacer el baño y la cocina. Fregar los platos. Vaciar la nevera. No pensar."


***


"Tu voz. Cómo suena."



fragmentos de "óxido", de Lara López. Ed. Xordica

domingo, 4 de septiembre de 2011

me faltas



... ¿Cómo sería el corazón?

¿Tendría realmente aquella forma bonita de las postales de colores?

¿Tendrían todos los corazones el mismo formato?

¿Deformarán los dolores los corazones?..."


(Cálidas eran las noches. Dina Salústio. Baile del sol 2011).


viernes, 2 de septiembre de 2011




(¿qué? ni se te ocurra molestarme ahora)


Ha sido una semana para olvidar, para quitar del mes, con un delete cualquiera. desde el lunes, que se hizo infinito, inacabable, inabarcable, agotador. nueve horas y un batido de plátano y me quedó intacta la tonga de papeles, la sensación de no haber dado un solo pasito. entre sueño y pesadilla los fui poniendo en orden. con ganas de oír el despertador, desesperada viendo el lento ritmo de las manecillas. con el primer café de la mañana leía:


"Tienes siempre tanta prisa...-dijo Vance en tono de lamentación-. No te precipites. La sabiduría de los grandes filósofos nos previene contra ello. Festina lente (apresúrate lentamente) dice César, y el Corán dice con toda claridad que la prisa es del diablo. Shakespeare despreciaba constantemente la prisa: 'Se cansa pronto quien espolea demasiado rápido', 'Juiciosa y lentamente mejor que tropezar por correr demasiado'. Y no digamos Molière... ¿Recuerdas el personaje de Sganarelle?: 'Le trop de promptitude à l'erreur nous expose' (El exceso de rapidez nos expone a error). También Chaucer era de la misma opinión: 'No se apresura quien sabe esperar prudente'. Incluso las personas corrientes han plasmado la idea en diversos proverbios. 'No por mucho madrugar amanece más temprano'. 'Visteme despacio que tengo prisa'...


... Para que luego digan, que los mensajes del más allá no existen.


(El caso del canario asesinado. Willard H. Wright)